Un artefacto explosivo fue arrojado en la estación de policía Florido-Mariano ubicada en la calle Fuentes de Mexicali, al este de la ciudad de Tijuana, Baja California.

Fue poco antes de las 6:00 horas cuando un agente de la Policía Municipal se percató que unas personas lanzaron una granada.

Esto generó la movilización y desalojo del personal, incluso el retiro de vehículos y patrullas que se encontraban en el estacionamiento.

La zona fue resguardada por elementos del Ejército Mexicano y Guardia Nacional en espera de que el equipo especializado de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) retirara el artefacto.

A un costado se ubica la estancia infantil La Presa, cuya titular Magdalena Ruan, explicó que resguardaron a 27 niños, a cuyos padres llamaron después ante la cancelación de clases por lo sucedido.

​Al resto de la comunidad, incluidos niños de un preescolar, les pidieron no llegar al plantel con el fin de proteger la integridad de alumnos y profesores.

Tres horas después llegó el personal de la Sedena, quienes tras revisar la granada, determinaron era de práctica y sin riesgo, luego procedieron a levantarla y abrir para revisar sus contenido, pero no tenía nada. Luego el personal militar se llevó el artefacto.