Javier Villarreal implementa en diversas empresas la extorsión como medio para evitar huelgas en Sonora.

El líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Sonora, Javier Villarreal, y su cercano aliado Francisco Vázquez han sido acusados de llevar a cabo una serie de extorsiones a empresas en la región. Según fuentes internas, estas acciones buscan evitar huelgas durante la revisión de contratos colectivos de trabajo en el estado.

Se afirma que estas prácticas tienen lugar bajo la dirección del gobernador Alfonso Durazo, con el objetivo de mantener la estabilidad gubernamental y evitar conflictos laborales que puedan socavar su administración. Además, se especula que Villarreal busca obtener un puesto político, posiblemente una diputación federal o plurinominal, lo que podría explicar su compromiso con las directrices del gobernador.

Este escándalo ha generado preocupación entre la clase obrera representada por la CTM, ya que se acusa a Villarreal de descuidar sus intereses en favor de sus aspiraciones políticas personales. Se denuncia que estas acciones han impedido que los trabajadores aprovechen los procesos de revisión del contrato colectivo de trabajo para exigir mejores condiciones laborales.

Las autoridades competentes están siendo instadas a investigar a fondo estas acusaciones y tomar medidas apropiadas para garantizar la transparencia y la justicia en el sector laboral de Sonora. La comunidad espera respuestas claras y acciones concretas para abordar este preocupante asunto.

La clase obrera de Sonora espera que las autoridades respalden su decisión en caso de elegir ir a una huelga si presentan inconformidad a la negociación del CCT, haciendo un llamado al presidente de la republica a no permitir que el gobierno de Sonora interponga medidas para sabotear sus huelgas y se respete la libre expresión en la búsqueda de mejores condiciones laborales para los trabajadores de la región.