Los libros de esta edición se dividieron en cuatro colecciones, las cuales fueron Autores de Baja California, Edición Nacional, Arte y Patrimonio, entre otras colecciones

Alrededor de 6 mil libros del Fondo Editorial La Rumorosa, creado durante la administración estatal de Jaime Bonilla Valdez no han sido localizados en los almacenes, indicó Alma Delia Ábrego Ceballos, titular de la Secretaría de Cultura de Baja California.

“No se habían encontrado un número importante de libros, entonces hicimos lo que es conducente a la administración que fue dar vista al órgano interno de control, los cuales abrieron una carpeta de investigación y en este momento sigue su marcha”, dijo.

Ábrego Ceballos, indicó que la dependencia sí cuenta con los documentos y comprobantes de entrega del resto de los libros editados durante la pasada administración estatal.

Según un comunicado publicado el 30 de agosto de 2021 por la Secretaría de Cultura, los ejemplares del Fondo Editorial La Rumorosa serían enviados a los diferentes CEART del estado y entregados a la población de forma gratuita.

Los libros de esta edición se dividieron en cuatro colecciones, las cuales fueron Autores de Baja California, Edición Nacional, Arte y Patrimonio, entre otras colecciones.

Durante la conferencia semanal del gobierno del estado, Ábrego Ceballos indicó que hace dos meses, la gobernadora de Baja California Marina del Pilar Ávila Olmeda firmó un decreto para entregar libros almacenados, sin especificar si pertenecían a la Editorial La Rumorosa.

“Un decreto que nos permite regalar 11 mil libros que encontramos en las bodegas, empolvados, están siendo parte del programa que se llama Circular el Arte”, dijo

Ábrego Ceballos añadió que en lo que va de la administración han repartido 6 mil libros donados por el Fondo de Cultura Económica (FCE) a infantes que habitan albergues y casas hogares.

Además de que la dependencia, en conjunto con el FCE, está editando una colección de libros especiales, para las infancias y jóvenes en contexto de movilidad, los cuales serán distribuidos en los albergues del estado.

“En esos lugares verdaderamente el libro es un refugio”, dijo la funcionaria.