En los últimos años en México se ha visto un gran incremento de la gran cantidad de empresarios que existen, muchos de ellos a pesar de sus riquezas tratan de mantener bien a su comunidad, apoyando fundaciones o simplemente haciendo inversiones benéficas para su comunidad.

El ingeniero físico, Gustavo Tomé es uno de ellos, siendo un egresado del Tec de Monterrey y a pesar del gran éxito empresarial que ha tenido en los últimos años, se ha esmerado en invertir en la zona de Cancún.

A Gustavo lo han denominado “El Tiburón Mexicano” debido a su historia de éxito, toda su vida se mantuvo en en un bajo perfil, fue hasta 2014 donde comenzó a invertir y su primera inversión fue comprar una parte del banco Liberbank.

Por lo mismo de ser su primera inversión y de esa magnitud, generó gran impacto, logrando salir del “anonimato”  y además es un inversionista que le gusta apostarle a lo difícil, donde no muchos empresarios se arriesgan, es por ello que recibió ese apodo.

Gracias a los riesgos que ha tomado dentro del mundo de las inversiones, a sus 40 años, ha logrado convertirse en CEO de algunas empresas como Da Vinci, Fibra Plus y ser el presidente de los Fondos Némesis.

Gustavo Tomé, asegura tener una habilidad para poder detectar oportunidades y necesidades del consumidor y encontrar la manera de cumplir con esas necesidades.

Una de esas oportunidades de inversión, es la que realiza “El Tiburón” construyendo zonas habitacionales en donde la gente que busque irse a vivir a Cancún, pueda encontrar estas zonas llenas de departamentos en excelentes ubicaciones.
Gustavo ha decidido hacer este negocio junto a la empresa Marea Elite Residence, juntos han logrado crear estos espacios en Cancún, teniendo todas las comodidades esperadas por sus clientes.